Guanajuato. – Luis Arturo Solís Bravo, presidente de la Unión Nacional de Padres de Familia (UNPF), dijo que es preocupante el raquítico aumento presupuestal para la educación, ya que el crecimiento fue menor a un punto porcentual y era necesario destinar una partida extra para atender a los alumnos con retraso educativo.
Mencionó que el Gobierno Federal debió haber apostado por la regularización de estudiantes con rezago educativo tras los dos años de pandemia de coronavirus, debido a que en muchos casos el aprendizaje que han obtenido ha sido deficiente.
Señaló que el rezago educativo no sólo se ha dado en estudiantes de secundaria sino también en estudiantes de nivel primaria, pues hay niños de sexto grado que están por culminar sus estudios para pasar a secundaria y tienen un aprendizaje de niños de cuarto grado y también hay jóvenes de tercero de secundaria con desarrollo educativo de un alumno de primer grado.
“Eso es a lo que el gobierno le tenía que haber apostado, a la regularización de todos estos niños en el próximo ciclo escolar o establecer en el presupuesto actual del 2022-2023 una partida adicional para meterle a la adecuación y que haya regularización”.
Destacó que el recurso destinado para la capacitación de maestros y para la mejora de infraestructura es limitado, lo cual está haciendo que los últimos cuatro años sean perdidos en materia educativa.
Manifestó que el proyecto de la Nueva Escuela Mexicana impulsado por el Gobierno Federal no prosperará si no se aplica de forma adecuada en beneficio de la comunidad educativa.