Por: Carlos Blanco López
Con toda la intención de desviar la atención de la reciente derrota que sufrió en la Cámara de Diputados después de que los partidos de oposición le cerraron el paso a su propuesta de ley de reforma eléctrica, el presidente López Obrador busca generar una gran polémica con la UNAM, y sus millones de egresados, exponiendo que no está de acuerdo con el lema de la máxima casa de estudios: “Por mi raza hablará el espíritu”, porque según esto no cree en las razas, sino en las culturas.
El jefe del ejecutivo morenista argumentó que admira a José Vasconcelos, pero “no estoy de acuerdo con él, con el lema de la UNAM”, y remató su dicho considerando que cada persona puede pensar con libertad, aunque conforme a su criterio “está emergiendo y saliendo a flote el racismo, el clasismo y la discriminación”.
No hay mucho que decir, salvo que aunque uno no esté de acuerdo con sus dichos, se le respetan, además de que está en su derecho de impulsar una estrategia mediática orientada a que los simpatizantes de Morena lo sigan considerando como a un héroe invencible.
¿Quién fue José Vasconcelos?, entre otras cuestiones, fue rector de la UNAM del 9 de junio de 1920 al 12 de octubre de 1921, y durante su rectorado se preocupó por alejar a la Universidad de la imagen elitista y le otorgó una misión histórica al decir: “Esta es la Universidad de la nación, del pueblo mexicano”.
En abril de 1921, Vasconcelos propuso al Consejo Universitario cambiar el escudo que hasta entonces estaba formado por un águila en un nopal, enmarcada por la leyenda patria: ciencia, amor, salud y pueblo”, y propuso uno nuevo con el lema: “Por mi raza hablará el espíritu”, lo que para Vasconcelos significó la convicción de la UNAM de que “la raza elaborará una cultura de tendencias nuevas, de esencia espiritual y libres”.
De acuerdo con Fabio Moraga, investigador de la Coordinación de Humanidades de la UNAM, y estudioso de la vida de José Vasconcelos, el lema propuesto reflejaba la realidad de una época en la que las esperanzas de la Revolución estaban vivas, en las que había fe en la patria y el ánimo se extendía en el ambiente.
El estudioso universitario explica que ese espiritualismo que profesaba Vasconcelos era parte de una corriente intelectual que se plasmó en la educación mexicana por largo tiempo y que se tradujo en las campañas de alfabetización y las misiones culturales.
Fabio Mayorga explica que la “raza” es una abreviación de la “raza cósmica”, que se refiere al mestizaje que se dio en el continente americano, que Vasconcelos concretó en la ideología de la “quinta raza”, una síntesis de todas las razas del mundo para construir una nueva civilización:
“Humaniza el tema de la raza, lo adapta a América Latina, generando un discurso político que mueve a la gente; es un aporte enorme. Mas allá de la raza cósmica, une a todos los latinoamericanos bajo una misma identidad”.
Con el lema de por mi raza hablará el espíritu, José Vasconcelos buscó unir a toda la América Latina bajo la misma identidad política y cultural: “Fue una idea trascendente porque, por primera vez, nos hizo razonar que somos muy parecidos y que necesitamos avanzar juntos, concluyó Fabio Moraga.
Ojalá que el presidente López Obrador comprenda que para que México prospere y haya menos ricos y menos pobres, lo urgente es avanzar juntos.