Por: Antonio Díaz Herrera
Ciudad de México. – Mediante la cuenta de Facebook Colectivo Estudiantil Rabia Social (https://www.facebook.com/colectivo.estudiantil.rabia.social), se difundió una amenaza contra toda autoridad de la UNAM.
En el video de 42 segundos, se observa a dos personas vestidas totalmente con prendas en color negro, así como una mesa sobre las que están colocadas como escenario, una bomba molotov, seis cohetones o barrenos, un aerosol de pintura, un bote de alcohol del 96, un explosivo que se comercializa con el nombre de “huevo de codorniz”, una botella de ácido muriático y un recipiente más con forma de termo.
Tras las personas vestidas de negro, fue colocada en la pared, una cartulina pegada con cinta adhesiva en color plata, que también es utilizada por su fortaleza, para adherir cohetones a latas de gas butano y hacerlos explotar.
En la cartulina fue escrita la siguiente leyenda: “Convocamos a la guerrilla urbana anarquista en la UNAM” y el símbolo de la anarquía.
En el video se escucha una voz femenina en la que se ofrece el siguiente mensaje:
“Tras los ataques recientes a las capuchas dentro de la Facultad de Contaduría y Administración, quedó claro que Rectoría, así como Vigilancia UNAM, han comenzado una cacería de “nosotres” como capuchas”.
“Es por eso que, convocamos a una guerrilla en contra de toda autoridad dentro de la UNAM, no en nombre de una Facultad, un colectivo o un grupo de personas, sino en nombre de la capucha, de la anarquía y la resistencia contra su persecución y opresión”.
“Hacemos un llamado a todas las capuchas a accionar en contra de la Universidad, en contra de sus muros, sus vigilantes y sus porros”.
“Que el fuego y los golpes resuenen en todo el campus, hasta que triunfe la anarquía”.
Los hechos registrados en la Facultad de Economía de la UNAM, a los que refiere el video, se tratan de la toma de instalaciones efectuada el 23 de noviembre pasado, cuando un grupo de encapuchados, irrumpió en la Facultad, “portando palos, varillas y artefactos explosivos”, indicó en un comunicado la Universidad.
La máxima casa de estudios especificó que, este grupo de “violentos”, ingresó a la Facultad, donde arremetieron contra el inmueble y estudiantes quienes los contuvieron, precisando que en la “zacapela”, un alumno resultó descalabrado. En estos hechos fueron detenidas cuatro personas entre ellas Josué “N” e Israel “N”, quienes fueron remitidos ante el ministerio público.
Pese a lo anterior, los activistas dieron a conocer una versión distinta, al afirmar que fueron reprimidos por porros, integrantes del “grupo deportivo Búfalos”, funcionarios y docentes de la Facultad, personal de seguridad UNAM y Protección Civil.
Cebe hacer notar que, en el campus universitario, se han localizado volantes en los que se exige la libertad de Israel y Josué, y se demanda la desaparición de los porros de la UNAM.
Además, en ella se narra que el jueves 23 de noviembre, las autoridades de la Facultad de Contaduría y Administración, conjuntamente con un grupo de choque conformado por estudiantes cooptados por la dirección, amenazaron, golpearon y reprimieron a “compañeras y compañeros estudiantes que protestaban y se manifestaban por el cumplimiento de su pliego petitorio, al interior del plantel, con el rostro encapuchado.
Se agrega también que en el momento no solo buscaban violentar a golpes, sino también humillar a sus compañeras al punto de intentar desnudar a una de ellas, consiguiendo bajarle los pantalones, previo a haberla sometido y golpeado con un martillo en la cabeza.
En los volantes se indica que con estos actos de violencia enmarcados en la designación de Leonardo Lomelí como rector de la UNAM y de la elección del ex director de la Facultad de Contaduría y Administración, Tomás Humberto Rubio Pérez, como secretario Administrativo de la UNAM, se han interpretado como “el regreso de las tradiciones porriles, que realmente nunca se fueron”.
Con el fin de desmovilizar cualquier intento de organización por parte del estudiantado, se ha emprendido una campaña de desinformación y de criminalización de las y los estudiantes que protestaban y que fueron brutalmente golpeadas y golpeados con tubos, martillos y palos. “Violando todo debido proceso, cinco estudiantes fueron retenidos, privados ilegalmente de su libertad y desaparecidos por más de tres horas: uno de ellos fue aventado sobre Calzada de Tlalpan y a pesar de la detención claramente ilegal, los estudiantes Israel y Josué se encuentran en estos momentos, bajo prisión preventiva bajo los cargos injustificados de “robo calificado agravado”.
Finalmente, en los volantes se llama a que como comunidad se informen y exijan un alto a la violencia institucional que se ejerce al interior de la UNAM contra estudiantes, profesores y trabajadores.