Guadalajara, Jalisco. – El Consejo General Universitario de la Universidad de Guadalajara (UdeG), consideró que, el pasado 11 de julio, en el municipio de Tlajomulco de Zúñiga, ocurrió un crimen más en la cadena de violencia de los crímenes más arteros y cobardes cometidos en contra de la sociedad jalisciense, donde de acuerdo con lo informado por fuentes oficiales, una organización delictiva maquinó lo que a todas luces es un acto terrorista en Jalisco, dirigido al personal de la Fiscalía del Estado y a policías municipales de Tlajomulco.
Confirmó que, los elementos fueron atraídos a un punto con información falsa y, al llegar, les esperaba una trampa con artefactos explosivos, detonando siete minas terrestres, con un saldo de tres policías muertos, otras quince personas con graves lesiones y transcurridas pocas horas, se registró el fallecimiento de otros tres efectivos, además de que, doce personas permanecen en situación delicada de salud.
Para el Consejo General Universitario, el hecho no sólo es lamentable e indignante: es inédito y absolutamente inaceptable, por lo que, “Debe llevarnos a una reflexión profunda: Gobiernos, instituciones públicas, universidades, empresas, organizaciones civiles y la población en general debemos, al unísono, rechazar la violencia y jamás habituarnos a su flagelo. La normalización de la violencia y del miedo es la peor respuesta que podemos tener ante la crisis que padecemos”, Destacó.
Remarcó que, la gravedad de la situación nos exige enfatizar lo que nos identifica y nos une, como jaliscienses y como mexicanos, como personas que pertenecemos a una misma comunidad y compartimos una forma de vida pacifica, civilizada y solidaria´, por tanto, es momento de dejar de lado la polarización y la confrontación política, debiendo estar a la altura del reto más importante de nuestro tiempo y nuestro contexto: recuperar la paz y la tranquilidad. “Es un imperativo de Estado, no solo responsabilidad de los gobiernos”, aseveró.
Subrayó que, la ciudadanía, las organizaciones civiles, el Gobierno, las policías y las fuerzas armadas, en otras palabras, todas las instituciones, incluyendo la UdeG, debemos sumar nuestras voluntades y ponernos en marcha para combatir a la violencia.
Expresó que, es convicción del Consejo Universitario de la UdeG poner las capacidades institucionales –pedagógicas, científicas y morales- al servicio de la causa común de la paz, la civilidad, la justicia y el orden, ello, en colaboración con las autoridades gubernamentales y las organizaciones de la sociedad civil jalisciense.
Para concluir, manifestó al Gobierno de Jalisco y a las autoridades municipales de Tlajomulco, y de toda la entidad, su respaldo, al personal de la Fiscalía del Estado y a la Policía de Tlajomulco le hizo patente su solidaridad, en tanto que, a los familiares de las víctimas, expresó sus más profundas condolencias y les reiteró su apoyo incondicional.