Por: Carlos Blanco López
Escogiendo como foro la columna Bajo Reserva de El Universal, y la columna de Salvador García Soto, de ese mismo diario, la ex lideresa del SNTE, Elba Esther Gordillo, anuncia que contraerá nupcias el próximo viernes con su abogado Luis Antonio Lagunas Gutiérrez por lo civil y el sábado por la iglesia, en la ciudad de Oaxaca, con el propósito no tanto de compartir a la “sociedad” su próximo y feliz enlace matrimonial, sino con el claro objetivo de que de que todas las fuerzas políticas y el magisterio perciban que goza de cabal salud y con mucho ánimo para seguir actuando en el escenario político nacional.
García Soto considera que si bien “en la política tampoco hay edades lo que si existen son momentos y el de Elba Ester Gordillo parece haber pasado. Tal vez por eso hoy apuesta por su segunda pasión después de la política: los amores”.
Evidentemente que el periodista menciona que el momento de la maestra de actuar en política “parece” que ya pasó, a sabiendas de que quienes la conocen saben que para la chiapaneca las medias tintas no forman parte de su personalidad, en alguna ocasión sentenció que la van a “enterrar” como una guerrera, es decir, ahora con la columna de García Soto desliza o envía el mensaje de que el escenario político del país prescindirá de ella hasta que dejen de funcionar sus signos vitales, o sea víctima de un grave padecimiento que la inactive en la cama.
Ese y otros mensajes habrá que interpretar de lo que narra el periodista García Soto en su columna de hoy titulada: “La maestra se casa”. En primer término, hay que observar el escenario que seleccionó para contraer nupcias: Oaxaca, gobernada por Alejandro Murat, de quien se especula que entregará la plaza a Morena, y lo más relevante, Oaxaca es el feudo del contingente más consolidado de la CNTE que maneja un discurso muy agresivo contra la ex lideresa magisterial.
Habrá que observar si se activan muestras de repudio ante su presencia en la tierra de Juárez y/o si en su defecto la ex presidenta del CEN del SNTE operó para neutralizar toda muestra de inconformidad en contra, de no haber muestras significativas de rechazo, ello proyectaría que todavía cuenta con vasos comunicantes con algunos dirigentes de esa aguerrida disidencia magisterial, con lo que políticamente se anotaría un punto a su favor.
El otro mensaje contenido en la columna de García Soto tiene que ver con los fuertes lazos con los que aun cuenta entre el sector empresarial sobre el que ejerce influencia el ex jefe de la Oficina de la Presidencia, Alfonso Romo, para ello no en vano menciona que entre sus 150 invitados figura este importante empresario regiomontano.
Luego con el propósito de reiterar que nada tiene que ver con el partido Redes Sociales Progresistas (RSP), que en las elecciones del año pasado no logró acreditarse como partido político nacional, se vale del periodista para mencionar que ya resolvió las diferencias que tenía con su yerno y ex dirigente del sepultado partido RSP, Fernando González Sánchez, y con su hija Maricruz Montelongo, de tal manera que se interprete que las RSP funcionaron el año pasado al margen de sus decisiones e influencia por el “distanciamiento” que mantenía con su yerno y su hija. Obvio que para quien conoce la trayectoria de la ex lideresa magisterial ese supuesto distanciamiento nunca existió. Ni el ex subsecretario de Educación Básica, González Sánchez, ni su hija Maricruz, serían capaces de llevarle la contraria. Ellos le deben todo a la aguerrida ex lideresa magisterial; sin ella, no son nada.