Por: Carlos Blanco López
Cuando comparezca el 25 de abril ante los diputados federales de la Junta de Coordinación Política, la secretaria de Educación Pública, Delfina Gómez, ya no solo tendrá que hacer gala de imaginación para explicar la inexplicable cancelación del programa de escuelas de tiempo completo.
Ahora también tendrá que ofrecer una serie de comentarios que permitan entender la eficacia y viabilidad de la nueva propuesta de planes y programas de estudio que está elaborando con su equipo de colaboradores en la SEP, que incluye como escenario principal no la escuela sino la “comunidad”, además de que en dicha propuesta el conocimiento científico perderá su posición privilegiada en el currículum.
Y es que, de acuerdo con especialistas en el tema educativo, como, por ejemplo, Carlos Mancera Corcuera, ex subsecretario de Planeación y Coordinación en la SEP; Gilberto Guevara Niebla, ex subsecretario de Educación Básica, y el ex rector de la UNAM, Francisco Barnés de Castro, esa propuesta implica que aprender matemáticas o ciencias tendrá igual valor que aprender las creencias, las tradiciones, los rituales y las fiestas de la comunidad.
En esto coinciden preocupados otros especialistas, historiadores y docentes, como Carlos Ornelas, Héctor Aguilar Camín, Soledad Loaeza, que indican que esa propuesta de educación comunitaria elaborada bajo la batuta de Delfina Gómez, no cuenta con antecedentes históricos ni en “México ni en el extranjero”.
Están seguros que una educación comunitaria como la que propone la SEP del gobierno morenista “asume una idea mítica de la comunidad que responde a una fantasía comunitaria más que a la realidad mexicana”.
Esos comentarios en contra de la nueva propuesta de planes y programas de estudio, que elabora la secretaria Delfina Gómez, vienen desglosados en un desplegado elaborado por más de 100 especialistas, historiadores y académicos, entre los que se incluyen los arriba citados, y que hoy aparece publicado en el diario La Crónica.
Evidentemente que los autores del desplegado lo publicaron ayer con el objetivo de que los legisladores de la oposición adopten sus preocupaciones y se las planteen a la maestra Delfina Gómez el día que comparezca ante los integrantes de la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados.
Desde luego que también la maestra Delfina Gómez tendrá que explicar si efectivamente los planes y programas de estudios son o no una prioridad del gobierno de la cuarta transformación, en tanto que el presidente López Obrador ya dio a entender que ese tema no está entre sus principales preocupaciones.
Hace unos días al señalar sus prioridades en el sector educativo, el presidente López Obrador, expresó que lo primero es el apoyo y el respeto a los maestros; lo segundo, la infraestructura en las escuelas; la tercera, los contenidos de los nuevos libros de texto; y en cuarto lugar: la entrega de becas a los estudiantes del país.
De los planes y programas de estudio, ni se acordó… ¿Será que solo son una fantasía de Delfina y de sus colaboradores más cercanos; uno de ellos muy consentido en Palacio Nacional?