Por: Antonio Díaz Herrera
Ciudad de México. – El en marco del Foro Nacional por el Incremento Salarial a Todos los Trabajadores del País, celebrado ayer en la Plaza de la Constitución, por iniciativa de la CNTE, en el que se contó con la participación como ponentes de Humberto Oseguera Barajas, abogado laborista; Yenny Aracely Pérez Martínez, en representación de la Coordinadora y Luis Bueno Rodríguez, por la Conferencia de las Resistencias, se arribó a las siguientes conclusiones:
1. Sólo mediante la lucha organizada de la clase obrera, trabajadores públicos y privados aglutinados en el Frente Único de Clase, se podrá enfrentar al enemigo común que es el Estado burgués opresor; y la transformación real de las condiciones de vida y del trabajo de la clase obrera, del campesinado y de las masas populares únicamente puede surgir del desarrollo de la conciencia de clase.
2. Luchar por aumento salarial del 100% para recuperar la pérdida del poder adquisitivo, defender e incrementar nuestras prestaciones laborales actuales; impulsar la lucha contra el charrismo sindical y por la democratización de los sindicatos, los trabajadores deben ser quienes en una organización contundente defiendan sus derechos; y demandar el restablecimiento de la jubilación solidaria para todos los trabajadores. Es necesario que en el VI Congreso Nacional Extraordinario preparemos la huelga nacional.
3. Llamar a los organismos sindicales y a las agrupaciones de jubilados y pensionados a organizar una Jornada Nacional de Movilizaciones con base en un pliego nacional de demandas; exigir el retiro de las iniciativas de ley de López Obrador del 5 de febrero, relativas a los salarios mínimos profesionales y pensiones; que se suprima la contrarreforma al artículo tercero constitucional, la erradicación de la Ley General del Sistema para la Carrera de las Maestras y Maestros y el brazo ejecutor del USICAMM; y por la abrogación de las reformas estructurales a la educación y seguridad social, por un régimen de pensiones basado en la solidaridad intergeneracional y en el reparto sin UMAS ni Afores.
De igual forma, a través de un comunicado, la CNTE difundió una declaración política en la que explicó que, aun cuando en el presente sexenio ha habido aumentos al salario mínimo, este no ha impactado en los salarios contractuales de los trabajadores formales, quedando muy por debajo de la inflación y lejos de la canasta básica.
Lamento también que, los sindicatos existentes, lejos de velar por intereses de sus afiliados, recrudecen el entorno hostil donde nos encontramos, debido a su corporativización y afinidad a los gobiernos burgueses, lo que significa una amenaza lesiva para la clase trabajadora, permiten el desmantelamiento de sus conquistas y restauran la esclavitud; se agudiza la explotación del hombre por el hombre, llevando a las peores condiciones a los generadores de la riqueza.
Enfatizó que, con lo anterior, nos trasladan de la pobreza a la miseria, se provoca un entorno donde no se quiere escuchar la voz de los trabajadores y las trabajadoras y solo se establece el diálogo con las dirigencias cooptadas, “vivimos en tiempos donde se pretende la individualización de la relación laboral para imponer un estado de indefensión a los trabajadores”.
Es innegable, concluyó, que el estado mexicano, los dirigentes propatronales y los partidos políticos han avalado las reformas estructurales y lesivas contra el pueblo.