Los gobiernos deben subvencionar y facilitar, pero no controlar para fines políticos, la educación y producción académica de alta calidad, aseguran el economista estadounidense, James Heckman, quien recibió el premio Nobel de Economía en el año 2000, y el escritor francés, Jean-Marie Le Clézio, premio Nobel de Literatura 2008, al firmar, junto con otros intelectuales, una carta de apoyo a la comunidad académica y estudiantil del Centro de Investigación y Docencia Económica (CIDE).
En esa carta los dos premios Nobel consideran que, sin libertad académica, las sociedades no pueden desarrollar las herramientas que necesitan para resolver sus problemas y mejorar sus condiciones, en clara alusión al problema que vive el CIDE, donde el personal académico y los estudiantes rechazan, entre otras cosas, el nombramiento de José Antonio Romero Tellaeche, como director de esta institución fundada hace cincuenta años durante el sexenio de Luis Echeverría.
Por lo pronto, mientras la comunidad del CIDE es respaldada, entre otras instituciones, por la UNAM, la UAM, la ANUIES y el Tecnológico de Monterrey, así como por dos premios Nobel, la reunión que se tenía programada para hoy entre la directora del Conacyt, María Elena Álvarez-Buylla, con la comunidad del CIDE, se recalendarizó para mañana, cuando se cumplen 12 días de paro de actividades en dicha institución educativa.