Por: Carlos Blanco López
De nada sirvió el montaje puesto en marcha por el CEN del SNTE en Coahuila para favorecer la imagen del subsecretario de Seguridad Pública, Ricardo Mejía Berdeja, dentro del contexto en que la dirigencia nacional de Morena dio a conocer los resultados de la encuesta que levantó para conocer el nombre del político que será el candidato de este partido al gobierno del estado y que resultó ser el senador Armando Guadiana.
Horas antes de que se diera a conocer el nombre del ganador de la encuesta la dirigencia nacional del SNTE, que encabeza el coahuilense Alfonso Cepeda Salas, soltó la versión en algunos medios de que “el clan Moreria pierde el control de las secciones 35 y 38 del SNTE en Coahuila”, y que solo la sección 5 sigue bajo la influencia de Carlos Moreira.
Enfatizando, además, que los candidatos triunfadores “morenistas”, en la sección 38, Isela Licerio Luévano, y Arturo Díaz González, en la 35, cuentan con una estrecha cercanía con el subsecretario Mejía Berdeja, lo que ayudaría en mucho para que gane las elecciones estatales en el 2023.
Lo único que se buscaba con esta información era demostrar que Mejía Berdeja había venido realizando un excelente trabajo político en Coahuila al grado de que en los últimos meses ya había logrado penetrar en el ánimo de las maestras y los maestros de esta entidad.
De ahí que no pocos columnistas de esta entidad multiplicaran también la versión de que: “hoy el SNTE, ha dejado de ser la servidumbre política y de embrutecimiento educativo del Neoliberalismo, porque el gobierno de la 4T le ha dado el tiro de gracia al Neoliberalismo y a una Oligarquía que ya no domina y donde, gentes como el profesor Alfonso Cepeda Salas, dirigen un sindicato para detener las raterías en contra de sus agremiados, mejorar y defender prestaciones y hacer Patria, por eso su participación en las secciones 35 y 38 del SNTE de Coahuila, son vitales para dar el triunfo a la gubernatura a personajes como Ricardo Mejía Berdeja, de ser el candidato oficial de Morena en Coahuila y sacar de una vez por todas del gobierno al PRI y al Clan de los Moreira y demás ramificaciones”.
No, pues sí.
Pero por qué se menciona que Cepeda Salas hizo todo un montaje para favorecer la imagen de Mejía Berdeja, por una sencilla razón: desde hace algunos años la dirigencia nacional del SNTE ya había logrado someter bajo su control a las dirigencias de las secciones 35 y 38, no así a la sección 5, que, a la fecha, con el triunfo de Everardo Padrón, se ratifica el cacicazgo que sigue manteniendo sobre esta gremial Carlos Moreira Valdés, hermano de los exgobernadores Humberto y Rubén.
El primero, muy cercano a Elba Esther Gordillo.