Ciudad de México, Senado de la República. – En el marco de una protestapor los 10 años de la desaparición forzada de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, un grupo de Normalistas lanzaron cohetes y petardos contra las instalaciones del Senado de la República, pese a la presencia de un amplio dispositivo de seguridad.
Durante el acto, el abogado y vocero de los familiares, Vidulfo Rosales, explicó que la protesta frente al Senado fue para denunciar el poder que a través de las leyes se le otorga a las fuerzas armadas, especialmente por la última reforma constitucional que adscribe la Guardia Nacional (GN) a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
Recordó que las investigaciones sobre el Caso Ayotzinapa se detuvieron cuando se señaló “la responsabilidad del ejército mexicano” en la desaparición de los estudiantes, pues no se ha entregado la información completa que “ayudaría a desentrañar lo que pasó” con los normalistas “que fueron llevados al 27 Batallón de Infantería”.
En la protesta también participaron integrantes de la Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas de México (FECSM) y estudiantes de la Normal de Ayotzinapa, quienes denunciaron la responsabilidad del “gobierno, el ejército y las fuerzas policíacas” y el ocultamiento de la información.
La protesta de este martes se suma a la que este 23 de septiembre realizaron frente a la Secretaría de Gobernación, donde los padres y madres reclamaron al presidente Andrés Manuel López Obrador, a tan sólo 6 días de que termine su sexenio, “no haber cumplido sus promesas, no haber hecho nada” y ser “igual” que sus antecesores.
La senadora Lucía Trasviña resultó afectada por los petardos arrojados en el Senado por normalistas, manifestantes y padres de los estudiantes desparecidos de Ayotzinapa. Lo anterior fue dado a conocer por el presidente de la Mesa Directiva del Senado, Gerardo Fernández Noroña.
“Había dicho que sólo hubo algunos daños materiales. Lamentablemente no es así, la senadora Lucía Trasviña que tenía abierta su ventana, recibió los efectos de una de las explosiones, que le lastimaron el ojo derecho y alteraron su presión sanguínea, por lo que se le tuvo que administrar oxígeno”, dijo.
Sin embargo, aclaró, que la senadora Trasviña, “es tan de una pieza” que está atendiendo desde su oficina la sesión y votará la reforma de la Guardia Nacional.