Ciudad de México. – Un grupo de profesores de asignatura y ayudantes de la UNAM, entregó en las oficinas de la Dirección General de Atención Ciudadana de la Presidencia de la República, que dirige Leticia Ramírez Amaya, un oficio para la atención del presidente Andrés Manuel López Obrador, en donde se pronuncian por una verdadera transformación en la máxima casa de estudios.
Con el aval de 8 mil 562 firmas, los profesores de asignatura y ayudantes, recordaron que, este gobierno ha sido electo tres veces, en 2006, 2012 y 2018 y que, ningún gobierno en la historia de México ha tenido este gran nivel de aceptación, sin embargo, no había podido legitimarse en el poder debido a los fraudes electorales promovidos por la derecha, la cual es la misma que está apoderada de la Universidad Nacional.
Aseveraron en su escrito que, el principal programa de lucha de este gobierno, se ha caracterizado por erradicar la corrupción ya que considera que es el mal de la sociedad en el mundo, situación de la cual no es ajena la UNAM.
En este sentido, indicaron que, la universidad ha tenido rectores y autoridades que se han aglutinado en mafias con intereses ajenos a la universidad, que han implementado políticas neoliberales, haciéndole el juego a los gobiernos de derecha que impulsaron estas políticas de privatización las cuales viven a diario más de 350 mil alumnos, 41 mil académicos y 23 mil trabajadores administrativos.
Añadieron que, los últimos dos sectores han padecido durante el periodo neoliberal de una aguda precarización laboral, “es por esto que la universidad debe de iniciar un proceso de autocrítica, reorganización y democratización en sus formas de gobierno, ya que se ha impregnado de corrupción en los ámbitos académicos y administrativos tal y como lo dice el presidente del Tribunal Universitario Eduardo López Betancourt.
Anotaron que, este día se presentaron en Palacio Nacional, para entregar 8 mil 525 firmas que respaldan la rebeldía de los universitarios apoyando la transformación de la UNAM y en contra de los grupos de poder en las universidades.
Le recordaron al presidente, que los recursos que se le asignan a la universidad provienen del erario público y es por ello que debe ser el garante del buen uso de esos recursos; por lo que la autonomía no debería de ser un impedimento para exigir la transparencia de su buen manejo.
Afirmaron que, creen que es necesario que el gobierno pueda coadyuvar para que la universidad esté a la altura de las necesidades de la sociedad mexicana, ya que las autoridades escudadas en la autonomía universitaria la han sometido a sus intereses personales, usándola como trampolín político; así como lo hizo el rector José Narro Robles y otros rectores que la han querido desmantelar, tal y como sucedió en 1999 con el intento de privatización de José Francisco Barnés de Castro.
Por todo lo anterior, exigieron: 1. La estabilidad laboral y pagos justos al 75 por ciento del personal académico de la UNAM; 2. La fiscalización en el gasto de los recursos que se le asignan a la UNAM; 3. La democratización de la universidad a través del cambio de sus estructuras de gobierno; 4. El aumento de la matrícula universitaria; 5. La austeridad en los salarios de los funcionarios de la universidad, pues no puede haber funcionarios universitarios ricos con profesores pobres y 6. El cese a la represión, despidos políticos, denuncias, sanciones y amonestaciones montadas a profesores, trabajadores y estudiantes que participaron en el movimiento #UNAMnoPAGA en contra de la precariedad laboral en la universidad.