Por: Antonio Díaz Herrera.
Ciudad de México. – En el marco del Día Internacional del Trabajo, el secretario general del SNTE, Alfonso Cepeda Salas; los integrantes de los Órganos Nacionales de Gobierno Sindical y los secretarios generales seccionales, firmaron un pronunciamiento, dirigido a los trabajadores, al movimiento sindical y al pueblo de México, en donde se señala lo siguiente:
“El Día del Trabajo es una fecha histórica que moviliza a la clase trabajadora de todo el mundo. La convocatoria la iniciaron los mártires de Chicago, Río Blanco y Cananea.
Conmemoramos el 1 de mayo reafirmando nuestra conciencia colectiva y fortaleciendo nuestra unidad y solidaridad para seguir construyendo una mejor sociedad con justicia, equidad, legalidad y bienestar.
En 2018, el pueblo de México y los trabajadores decidimos poner fin al régimen neoliberal y conservador que empobreció a los mexicanos y sumió al país en la corrupción, la impunidad, la inseguridad y la violencia.
La Cuarta Transformación abrió una nueva etapa para la nación: de esperanza, impulso al desarrollo y atención a las condiciones de vida de la clase trabajadora.
Al llegar al sexto año de gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, reconocemos los avances:
- Vigencia de un nuevo orden jurídico y sistema de justicia laboral, para asegurarnos un trabajo digno, que obliga a los patrones y al Estado mexicano a respetar la dignidad humana.
- Recuperación del poder adquisitivo de los trabajadores, cuyos salarios han tenido un incremento superior a la inflación, estableciendo para los trabajadores de la educación por plaza un ingreso mensual mínimo de 16 mil pesos.
- Certeza laboral, con basificación de más de 950 mil trabajadores de la educación.
- La iniciativa de reforma al Régimen de pensiones de Cuentas Individuales que corrige las reformas de 1997 y 2007, para contar con un retiro digno y que un trabajador se pensione con el 100 por ciento de su salario.
Los trabajadores de la educación tenemos memoria. Sabemos que los gobiernos y partidos de la derecha han sido y serán abiertos adversarios de la clase trabajadora mexicana.
La transformación y políticas impulsadas por el presidente López Obrador, están construyendo un nuevo régimen que ha reivindicado el trabajo y la seguridad social como derechos de los trabajadores, derechos que fueron violentados por los gobiernos neoliberales.
Estamos conscientes de que todavía existen demandas no resueltas. Sabemos que será necesario un nuevo gobierno progresista y de izquierda, para consolidar logros alcanzados, profundizar la transformación, resolver la agenda pendiente y evitar retrocesos.