Ciudad de México. – Simpatizantes del Movimiento Universitario de Víctimas de Violencia de Género, realizaron una concentración y mitin frente a la entrada principal de la Rectoría de la UNAM, para denunciar las agresiones que han recibido por parte de las autoridades universitarias que siguen tratando sus casos con indolencia.
En el marco de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer Trabajadora, los integrantes de este Movimiento, les advirtieron a las autoridades de la máxima casa de estudios que, “no tendrán la comodidad de su silencio”, porque ya no se callan y porque no van a dejar ninguna de sus agresiones de violencia institucional sin respuesta.
“Hoy rompemos el miedo y alzamos la voz, porque la UNAM, no está haciendo su trabajo, y por más maquillaje morado, rosa o anaranjado que se pongan, sin voluntad política y justicia restaurativa, sus pantomimas no nos sirven”, manifestaron.
Durante su protesta, en los muros de la Rectoría que les sirvieron de tendedero, colocaron carteles con las fotos de sus agresores y de aquellos funcionarios que han sido omisos o faltado a la justicia, durante las audiencias para desahogar sus casos.
De esta forma, se podían ver carteles con los rostros del propio rector de la UNAM, Enrique Graue Wiechers, a quien acusaron de encubridor de agresores y violentador institucional; además del abogado general, Alfredo Sánchez Castañeda y Guadalupe Barrera Nájera, titular de la Defensoría de Derechos Universitarios, quien desgasta a las denunciantes, para evitar que continúan con sus procesos.
El Movimiento Universitario de Víctimas de Violencia de Género, lamentó que a su arribó a la Torre de Rectoría, encontrarán sus puertas cerradas y que, en cambio, las aulas, talleres, laboratorios, pasillos y jardines de la institución, sigan abiertos para los acosadores.