Chilpancingo, Guerrero. – Estudiantes de la Normal Rural “Raúl Isidro Burgos”, de Ayotzinapa, hicieron un mitin político en el exterior de Palacio de Gobierno para exigir justicia por el ataque armado de policías estatales contra sus compañeros el 7 de marzo pasado, donde murió el normalista Yanqui Kothan Gómez Peralta, de 23 años.
A 13 días de los hechos, los estudiantes se concentraron en la sede del Ejecutivo estatal y el Auditorio Sentimientos de la Nación que estaban protegidos por muros y vallas metálicas que cercaban el edificio, donde después de realizar unas pintas en la fachada de cristal, el piso del auditorio estatal y los muros del encauzamiento, celebraron un mitin.
Los estudiantes escribieron consignas con las que resumen su exigencia de justicia por el asesinato de su compañero: “Ayotzinapa, ni perdón ni olvido”, “7 de marzo no se olvida”, “Quiero ser estudiante y no morir en el intento”.
Aun cuando fueron removidos los servidores públicos del gobierno estatal que tuvieron una actuación cuestionable después de los hechos y ayer fueron vinculados a proceso dos policías estatales por un juez federal, aún está prófugo el elemento que disparó a Yanqui Kothan.
El líder estudiantil demandó que se investigue a todos los funcionarios involucrados en el caso que por omisión o complicidad participaron en las irregularidades del caso, que derivaron en la criminalización de los normalistas.
Además, señaló que principalmente se debe investigar a Ludwig Marcial Reynoso Núñez y Rolando Solano Rivera quienes renunciaron a la Secretaría General de Gobierno y la Secretaría de Seguridad Pública de Guerrero, respectivamente; así como a la extitular de la Fiscalía General del Estado, Sandra Luz Valdovinos Salmerón.
Tras la manifestación, los normalistas abordaron los autobuses y regresaron a la Normal Rural de Ayotzinapa, ubicada en Tixtla.
Este martes, Gabriel Alejandro Hernández Mendoza, el vicefiscal de investigación de la fiscalía estatal y quien recientemente fue nombrado encargado de despacho, renunció al cargo.
Mediante un oficio dirigido a la gobernadora Evelyn Salgado Pineda, el funcionario notificó su renuncia con carácter de irrevocable.